Fleischer Retrospectiva (traducción): Sobre Superman

Buenas días, queridos lectores. Como sabéis estoy viendo mucha animación estadounidense, pero también me he parado a leer las impresiones y reseñas de otros autores que han incursionado en este medio. Yo soy una persona exigente, pero el mes de diciembre me encontré un artículo muy brillante sobre la serie cinematográfica de Superman (1941-1943), realizada por Fleischer Studios. Por esa razón, le pedí al autor, Frank Beef, que me permitiera traducir al español su artículo para que vosotros también pudierais leer su elaborada opinión de la primera serie del héroe norteamericano por antonomasia. Si os interesa podéis leer otros artículos suyos en el blog en el que escribe: Cartoon Theory. Sin más dilación voy a proceder con el texto principal:

Fleischer Retrospectiva -Parte 4-

Para cuando empezó la década de 1940, los Fleischer habían perdido gran parte de las particularidades de su estilo, "obligados" a seguir a Disney y, en general, al estilo de animación de la Costa Oeste. Los cortometrajes de Popeye, lo más parecido al antiguo estilo Fleischer, tomaban principalmente influencia de otros maestros de la comedia de la misma época, como Tex Avery, Bob Clampett, Frank Tashlin y el resto de animadores de Warner Bros. Los Fleischer Studios cerrarían pronto en 1942, pero antes de su partida agotaron su última oportunidad con una nueva serie protagonizada por un personaje muy popular en ese momento: Superman.

Los cortos de Superman producidos por los Fleischers entre 1941 y 1942 son completamente distintos a casi todo lo que se había producido antes. La primera gran diferencia se encontraba, por supuesto, en el género de obras producidas en aquel momento: la mayor parte de los cortos producidos, incluido los de los Fleischer, eran estrictamente comedias, pero los de Superman fueron uno de los primeros intentos de elaborar, casi por completo, películas dramáticas orientadas a la acción. Hubo algunos intentos, a saber, un cortometraje llamado Peace on Earth (1939), dirigido por Hugh Harman y Rudolph Ising para MGM y, remontándonos en el tiempo, The Sinking of the Lusitania (1918), dirigido por Winsor McCay. Sin embargo, este fue el primer intento de crear una serie continua con un tono dramático. En cierto modo, estos cortometrajes de Superman son mucho más similares, al menos en tono, a las series de ciencia ficción que se estaban produciendo durante las décadas de 1920 y 1930, como Flash Gordon (1936) y Buck Rogers (1939), y podría decirse que son parecidas o mejor que aquellas.

Otra gran diferencia es, por supuesto, el estilo de animación y dibujo, muy fiel a los cómics originales. Aquí no hay lugar para caricaturas extremas o ambigüedad en los diseños de personaje: su estilo es realista, tanto en términos de apariencia como de movimiento, de acuerdo con el escenario y el tono. Desafortunadamente, esta decisión tuvo un inconveniente: la animación de los personajes no resultó atractiva debido a la complejidad de los diseños y la falta de experiencia en relación a su aspecto realista. Los dibujos tendieron a ser rígidos, los movimientos se redujeron al mínimo para contar la historia y el uso de rotoscopio es relevante en multitud de escenas. Tal vez, esta sea la mayor diferencia con las producciones anteriores de Fleischer: la animación, a menudo el acontecimiento principal en la producción de Fleischer, pasa a un segundo plano y deja de ser el centro de atención.

No obstante, uno de los hechos más impresionantes en los cortos de Superman son los fondos y el uso del color. Fondos y decorados tienen una influencia Art Decò, de carácter muy geométrico y simétrico. Su aspecto también se inspira en la estética de Cine Negro, que alcanzó su mayor desarrollo en Estados Unidos durante los años 40. No obstante, hay diferencias. La estética Noir se basa principalmente en fuertes contrastes entre blanco y negro, la luz y la oscuridad, que representan a la perfección los personajes y situaciones ambiguos de las propias películas. En Superman no hay nada tan complejo; los personajes son perfectamente inequívocos y tienen roles prefijados perfectamente claros de principio a fin. Por tanto, el contraste entre la luz y la oscuridad se convierte en un tema de Bueno Vs. Malvado, con Superman obviamente representando el Bien en contraste con los muchos villanos malvados que enfrenta en todos y cada uno de los cortos. Dado que los cortometrajes de Superman están en tecnicolor completo, en lugar de la clásica estética negra y blanca, este contraste se logra entre colores más claros y oscuros en muchas escenas, como el azul y el rojo.

Finalmente, vale la pena gastar algo de tiempo en Lois Lane y su rol en la serie, especialmente en comparación con otros personajes femeninos animados. Lois Lane tiene un papel más activo si lo comparamos con otros de sus pares. Por lo general, se involucra en muchos eventos peligrosos, y tiene una carrera profesional exitosa. Esto es digno de mención si la comparamos con personajes como Blancanieves, que definitivamente son más pasivos, aunque menos de lo que mucha gente puede pensar. Por supuesto, la independencia de Lois Lane es limitada: a pesar de sus esfuerzos, a menudo sigue desempeñando el papel de la damisela en apuros salvada por Superman en muchos cortos, e incluso sus artículos exitosos están relacionados con la participación de Superman. Sin embargo, es un paso adelante en comparación con muchos de sus contemporáneos.

A pesar de que la serie de Superman fue de corta duración, durando unos tres años, su legado continuó. Entre sus admiradores se encuentran Hayao Miyazaki, quien "robó" los diseños de los robots de The Mechanical Monsters (1941), la segunda entrada de la serie, reutilizándolos para un episodio de su Lupin III (1977 - 1980) y por su largometraje Castle in the Sky (1986). El animador estadounidense Bruce Timm y su equipo echaron la vista atrás, hacia los cortos de Superman, durante la realización de Batman: The Animated Series (1992 - 1999) y Superman: The Animated Series (1996-2000), inspirándose en el mismo Art Decò y el cine negro. Desafortunadamente, su paso no tuvo efectos inmediatos en la industria de la animación, ya que muy pocos estudios intentarían hacer algo tan ambicioso con sus cortometrajes. Quizás el intento más cercano, al menos en términos de tono e intensidad dramática, ha sido el cortometraje Education for Death (1943), un cortometraje de Disney producido durante la Segunda Guerra Mundial, aunque es muy distinto de lo intentado por los Fleischer.