Reseña: Lupin III

• Año: 1971-1972
• Capítulos: 23
• Estudio: Tokyo Movie Shinsha
• Género: Acción, Aventura, Comedia, Robos

Un ladrón de leyenda

Sinopsis

Lupin III es un ladrón de fama mundial y nieto del mítico Arsenio Lupin, cuya mayor pasión es cometer robos, aceptar retos de otras personas o, simplemente, vivir grandes aventuras. En cada episodio le acompañarán otros personajes recurrentes como su mejor amigo Jigen, la atractiva Fujiko, el incansable Zenigata o el espadachín Goemon.

Historia y Desarrollo

La mayoría del público otaku desconoce la existencia de esta obra, pese a ser una franquicia con mucho tirón en Japón. Cada cierto tiempo aparece una película, especial o incluso una serie nueva sobre Lupin III, así que imaginad su importancia para que siga vigente pese a tener varias décadas encima. En realidad, en la época en que salió no tuvo tan buena acogida, pero su segunda serie sí la tuvo y se ganó al público japonés. La verdad no es de extrañar viendo el anime de los 60, caracterizado por ser infantil y aburrido. En cambio, Lupin III es un anime repleto de acción fruto de todas esas increíbles misiones acompañadas de delincuentes y policías. Podría decirse que tiene relación con las novelas de detectives y ladrones y un aire a varias películas de Hollywood. Y gracias a ese elenco de personajes tiene el suficiente encanto para atraernos. Por otra parte, su influencia en el anime posterior es innegable. No hay más que ver como hay bastantes ladrones o personajes carismáticos que recuerdan a Lupin como el gran Spike Spiegel. Dejando de lado su importancia como referente, pasemos al análisis de la obra como tal.

Desde su primer episodio, Lupin III se distingue por ser una obra que da prioridad a la diversión frente al contenido, es decir, pertenece a aquellas que llamamos obras de estilo sobre sustancia. Para conseguir que una serie de este tipo funcione necesitas tres factores: personajes carismáticos, énfasis en la acción, y, por último, una historia simple que sea divertida. Si logras reunirlos puede decirse que has tenido éxito. Y Lupin III lo consigue, al menos, en un nivel básico.

Para empezar, la diversidad de situaciones que involucran al protagonista y su panda son casi ilimitadas. Robos, huidas, persecuciones, atracos, enfrentamientos contra asesinos y organizaciones criminales, retos dirigidos a la policía, investigaciones y mucho más. Habitualmente las misiones que lleva a cabo Lupin y sus compañeros tienen que ver con algún robo de un objeto de enorme valor como joyas, armas antiguas o algún artefacto tecnológico muy avanzado que está en manos de un hombre poderoso y rico. Antes de hacerlo tiene por costumbre -como otros ladrones clásicos- enviar una nota donde indica el lugar y la hora en que ocurrirá el robo. Otros tantos casos que abundan son los duelos contra el desconfiado inspector Zenigata, que siempre está rodeado de un gran número de policías; o contra otros personajes como asesinos, mafiosos o algún personaje particular. Personalmente, me gustó cierta fuga que lleva a cabo Lupin cuando es encerrado en la cárcel por Zenigata y este está a punto de ser condenado a muerte.

Conectado a esto, los escenarios por los que se mueve Lupin son muy variados. El mundo puede ser muy similar al nuestro, pero el tipo de personas, lugares y ambientes que aparecen no tienen mucho que ver con lo que topamos en nuestra rutina diaria. Por un lado, sus peleas y fechorías tienen lugar  en tierra, mar o aire. No importa que sea una isla alejada, un paraje helado, un desierto o incluso en medio de una montaña. No obstante, suelen ser más habituales sus robos en mansiones o protagonizar una fuga en una prisión. Sus contrincantes suelen ser personas ligadas a la riqueza o a los actos delictivos como mafiosos, asesinos, ladrones, políticos corruptos y otros como policías o multimillonarios. Por desgracia, ninguno de ellos es un personaje recurrente que aparezca más de una ocasión para hacer frente al grupo principal. Y tampoco uno puede esperar recordarlos porque, en el fondo, todos son parecidos. Si los llegas a recordar por algo será más por algún truco que utilizaban y no por su personalidad.

Y hablando de trucos, Lupin suele resolver cada situación que se le presenta por medio de su ingenio o mediante diversos planes.  No importan tanto los recursos y los medios como la astucia. Y no es de estos clásicos personajes que se caracterizan por tener siempre éxito gracias a sus habilidades superiores sino que en cada episodio hay algo que sale mal o sufre un revés y debe apañárselas como sea para salir triunfante. Y vaya si lo hace porque su orgullo le impide abandonar. Por citar un ejemplo, en un episodio pretenden examinar un cadáver custodiado por la policía y logran desviar el automóvil que lo llevaba por una senda diferente. Sin cometer ningún error garrafal logran evitar que nadie sospeche nada y acometieran su plan con éxito. Sin embargo, al ser una serie de estilo sobre sustancia, los métodos o planes que utiliza suelen ser poco plausibles o muy cogidos por los pelos. Además de que uno sabe que nunca tendrá un reto lo suficientemente difícil y tarde o temprano lo conseguirá.

En cuanto a la credibilidad y plausibilidad de los hechos, uno tiene que aceptar que las conveniencias y las recursos sacados de la manga estarán al orden del día. Por poner un ejemplo, Lupin parecía una especie de Doraemon al principio de la serie al tener siempre algún arma, disfraz o herramienta que le ayudara en una situación complicada. Luego esto mejoró y dependía más de los planes que este podía pensar, pero siempre había algún golpe de suerte o se topaba con el sujeto idóneo. Y a veces estas eran muy graves (algún deus ex machina y fiats varios por ahí). La verdad tampoco es de extrañar sabiendo de la cantidad de situaciones que se podían dar a lo largo de la serie. Por no decir que sabemos perfectamente que ningún personaje puede morir salvándose de caídas mortales, tiroteos, etc Cabe decir que normalmente Lupin no se mete en el terreno de la fantasía o la ciencia ficción, pero en alguna ocasión tiene aventuras de este tipo.

Por otro lado, la historia sigue un formato episódico donde unos capítulos no están relacionados con los otros y cada uno tiene su propia conclusión. De ahí que uno se deba olvidar de esperar cualquier tipo de progreso en la historia. Y que en series posteriores esta fórmula resulta repetitiva. Al mismo tiempo, hace que los personajes permanezcan estáticos y nunca lleguen a desarrollarse, aunque el hecho de que sean personajes tan carismáticos e interesantes alivia este punto negativo. Del ritmo interior puedo decir que este es adecuado, quizá algo rápido en ocasiones pero bien medido. No obstante, debo incidir que la serie, en su primera mitad, cometía errores. En primer lugar, al realizar unas transiciones muy bruscas al cambiar de escenario o momento. Se sentían tan desconectadas que causaban un cierto malestar al espectador. En otros casos iniciaban un conflicto nada más empezar el capítulo sin tener un contexto. Por fortuna, con el cambio de director -se pasa de Masaaki Oosumi a Isao Takahata- se corrigen estos errores durante la segunda parte.

Para concluir, solo quedaría hablar sobre los mensajes o temas que se repiten en la obra, pero sinceramente no hay nada que destaque más allá del sentimiento de libertad de Lupin y su deseo de divertirse viviendo emocionantes aventuras. Eso sí, siempre tendremos traiciones, sorpresas, tiroteos, trampas, duelos, comedia, algo de erotismo por parte de Fujiko y muchos más momentos parecidos. Lupin III es una serie que se las apaña para entretenernos y mantenernos con el interés en la pantalla. Y bueno, al final del día, Lupin conseguirá robar lo que quiere o bien tendrá que perseguir a Fujiko para que le devuelva lo robado.

Personajes

-Arsene Lupin III: El protagonista de esta historia y nieto del famoso Arsene Lupin. Visto desde una perspectiva común, resulta ser bastante diferente del concepto de héroe ya que comete delitos. No obstante, su intención no es hacerse rico o hacer un gran daño, sino que sus robos los comete por la emoción que conlleva. Digamos que es su forma de matar el aburrimiento y se lo toma como un juego donde está apostando su orgullo. Por eso cuando pierde o es atrapado se siente humillado e intenta darle la vuelta a la situación. Su lema es “Atacar al enemigo con la velocidad del halcón y desaparecer como el viento”.

Entre otras cosas se le puede definir como astuto, perspicaz y un tipo muy curioso y aventurero. Tiene muchos talentos y habilidades en varios campos como el ser un maestro en el arte del disfraz, conducir todo tipo de vehículos, usar armas, capacidad para engañar, etc Por desgracia, no son todo ventajas para él ya que es algo torpe y descuidado, cayendo en algún ardiz o trampa de vez en cuando. Pero su mayor debilidad son las mujeres atractivas como Fujiko, la cual siempre se la juega para que consiga tesoros para él. Le pierden las faldas y, por eso, intenta rescatar alguna bella damisela. Curiosamente le gusta pescar, pero el pulpo le da urticaria.

-Daisuke Jigen: El mejor amigo de Lupin y su compañero durante los trabajos que realizan.  Confían el uno en el otro y, por eso, son tan buen equipo. Jigen es un hombre cauto y sensato, aunque como Lupin disfruta haciendo lo que hacen. Mantiene un perfil más bajo que su amigo, ya que suele estar esperando instrucciones de su parte y no habla tanto. Sin embargo, sin él Lupin no podría llevar a cabo sus planes y más de una vez le salva de la muerte.  En cierto modo es la voz de la razón cuando Lupin se emociona demasiado. Si algo sobresale en él es su habilidad con el revolver, siendo un pistolero que no suele fallar.

-Fujiko Mine: Una ladrona profesional y el interés romántico de Lupin. Su forma de ser contrasta totalmente con la imagen de las mujeres que había en el anime hasta el momento que salió (incluso bastantes mujeres de ahora). Esto se debe a que es una mujer sexy, independiente, fuerte, atrevida y que atiende sus propios intereses egoístas. En resumen, una mujer de armas tomar que no duda en usar su encanto femenino y otras armas para conseguir sus objetivos. Fujiko tiene tendencia a traicionar o liar a Lupin para su propio beneficio, aunque en el fondo le quiere. A veces son rivales, otras son aliados. Puede resultar un personaje un poco contradictorio al ser tan caprichosa. Como su "amante", habitualmente se disfraza y ocupa un puesto de subordinada del enemigo de turno como convertirse en secretaria, criada, etc A diferencia de Lupin, ella roba joyas y otros objetos por el valor que tienen.

-Kouichi Zenigata: Inspector de la policía metropolitana que persigue a Lupin desde hace muchos años, como hacía anteriormente su progenitor. Puede decirse que su destino es atraparlo y, por eso, muestra cierta obsesión por lograrlo. Zenigata es un hombre testarudo, desconfiado y anticuado, pero con un gran sentido de la justicia. Desgraciadamente raramente consigue atrapar a Lupin en sus fechorías y cuando por fin lo consigue este se escapa por algún medio. Lo gracioso de este asunto es que si de verdad lo encerraran para siempre tras capturarlo, su vida quedaría un poco vacía. Sin él su meta de vida estaría completada y esto se ve en uno de los episodios. Como curiosidades le gustan los fideos y es algo tímido en los asuntos amorosos.

-Goemon Ishikawa XII: Un maestro japonés de la espada cuya habilidad y técnica son casi perfectas. Puede decirse que es un samurai auténtico que viste y vive como un japonés de antaño. Algunos adjetivos que le acaen serían: tradicional, serio y poco hablador, orgulloso y cauto. Anteriormente, trabajaba como asesino y se enfrenta con Lupin varias veces hasta que por fin se hacen compañeros. Al igual que el protagonista, le gusta combatir y medirse con otros. Puede parecer muy serio, pero también sabe reírse.

Arte y Banda Sonora

El estudio animador de todas las partes fue el viejo Tokyo Movie Shinsha, conocido por series como La Rosa de Versalles o la película Akira. Pero como solo nos interesa la primera parte, pues hablaremos solo de ella. Nadie negará que la animación tiene sus fallos notorios, sobre todo eses cortes que fastidiaban un poco la experiencia. También está el hecho de que los personajes mueven bastante los labios en vez de haber movimiento, pero en este apartado Lupin III demuestra ser mucho más dinámico y menos limitado que varias series que le preceden. Sus diseños de personaje son novedosos para la época, no habiendo nada igual y aún son muy destacables. Raro es ver un hombre que tenga rasgos tan masculinos como pelo en los brazos y cerca de las manos. Su vestimenta también luce muy cool, sobre todo Jigen.

Del apartado musical se ocupaba Takeo Yamashita, un hombre prácticamente desconocido en la industria ya que no ha hecho nada relevante aparte de componer la banda sonora de Lupin III. Sin embargo, la música es bastante buena en mi opinión. Los temas musicales son muy enérgicos y algunos están cantados, en parte, en inglés. Destaca bastante ese jazz en sus canciones que las hace memorables.

Calificación: 6,5